Siempre que regreso a Castilla-La Mancha me doy cuenta de que parte de mis orígenes se encuentran en esta tierra y es por ello que siento algo especial cada vez la piso, mi bisabuela nació en Marchamalo (Guadalajara), quiso el destino que esta rama de mi familia partiera a Madrid a trabajar como músicos y capitán de alabarderos (guardias de honor de los reyes de España) en el Palacio Real de Madrid con Alfonso XIII, pero nunca olvidaron sus orígenes, mi abuelo nació también en Torrijos (Toledo). Hoy regreso a mis orígenes para disfrutar de la cocina del reconocido Mesón Octavio en Ciudad Real, retorno a los aromas y sabores que marcan mi ADN.

Desde 1997 los hermanos María Belén y José Antonio García Castro gestionan este establecimiento repartiéndose dirección y gestión de sala, en los fogones la cocinera Aurora García da forma a una gastronomía local pero que ha sabido evolucionar y refinarse para aplacar la cocina recia de estas tierras.

Belén nos da la bienvenida en la mesa con el Vermú Ama & Vive 2019, un proyecto exclusivo de este restaurante y la Bodega Castiblanque.

Y junto al vermú hojas de olivo, aceitunas y hojas de otros árboles otoñadas decoran un <jugó de aceituna cornicabra> que guarda toda la esencia de nuestro origen mediterráneo.

El primero de los platos de la tierra son las famosas <gachas manchegas> acompañadas de un crujiente torrezno, y aquí es donde ya podemos ver que las cantidades se amoldan a los nuevos tiempos en un formato de menú degustación, estos platos estaban pensados antaño para gente que trabajaba en el campo de sol a sol con un ejercicio físico que hoy no tenemos la mayoría.

Quiere Belén que las acompañemos con Gran Cueva Chardonnay Brut Nature Reserva de Bodegas Verum, acertada propuesta de vino espumoso D.O.: La Mancha que aligera el plato con sus notas cítricas, de fruta de hueso, pastelería fina y frutos secos.

No quería yo perderme otro gran clásico de la región que bien saben hacer en Octavio, son sus <Migas de pastor> que remata la cocinera con una yema de huevo que aglutina el plato con gran cremosidad. Una receta tradicional y muy humilde que originariamente se elabora con pan, chorizo, panceta, ajo y huevo frito

De nuevo cambiamos de vino, otro de los proyectos de Belén con la Bodega Castiblanque, en este caso se trata de un Moscatel al que también ha llamado Ama & Vive 2018, su botella es toda una declaración de intenciones de como se debe vivir

La verdura llega en un plato muy agradable <Asadillo de verano> pimientos  asados y pelados con mucho cariño coronados con yema de huevo duro.

La línea donde el huevo ha acompañado tres platos seguidos llega a <La tortilla de nuestra madre> un huevo poché con patatas cortadas en pequeños trozos a la que se añaden espárragos y un caldo intenso, ideal para hacer crecer a los niños.

No abandonamos en la armonía los vinos de la tierra, es el momento ahora de un monovarietal de Petit Verdot muy frutal, carnosa fruta roja en boca, es Bancal del Río 2015 de la Bodega Pago de Vicario.

Acompañará Pago de vicario a un <Arroz con pollo de corral y setas> sabroso, sencillo, pero con la materia prima de tierra de campo.


El siguiente plato nada tiene que ver con la historia culinaria de esta tierra pero los vínculos familiares de Belén han hecho que su marido asturiano tenga aquí un trocito de su tierra en estas bien preparadas <Fabes con compango>.

Seguimos por la ruta de los vinos La Mancha, ahora nos vamos a su corazón para degustar Anhelo Origen 2017 de Bodegas Anhelo, elaborado con la variedad Tempranillo en Campo de Calatrava, en un sorprendente territorio que se caracteriza geológicamente por ser una de las áreas volcánicas más importantes de la península, con 5.000 kilómetros cuadrados y 240 edificios volcánicos diferenciados.

Las carnes abren capítulo con una <Paletilla de lechal manchego>, de nuevo un producto excepcional con un tratamiento de cocina sincera, pegada a la tierra.

Los vientos de otoño traen los aromas de caza a La Mancha, será con su <Lomo de venado marinado> en plena temporada del cérvido, textura de carne y cocinado en su punto.

Termina este plato de caza con una ralladura de piña verde, y aquí no puedo dejar de preguntar a Belén si es influencia del Chef Miguel Ángel de la Cruz del Restaurante La Botica de Matapozuelos* (Matapozuelos-Valladolid) y en efecto me confirma que así es, sus padres vivieron en aquella zona guardando una famosa finca de caza y al conocer el trabajo de Miguel Ángel quiso probar el efecto de la piña de pino piñorero en estado verde, el resultado es inmejorable ya que refresca la siempre potente carne de caza y le da esos matices de campo tan aromáticos.

El postre llega con un <Pastel de Almendra y Arrope manchego de calabaza>, tradición en la elaboración de un postre árabe, dulce típico manchego que se elabora en las casas en tiempo de vendimia, de origen milenario consiste en la cocción a fuego lento de frutas dulces maduras hasta alcanzar un textura espesa, en este caso la calabaza es la fruta elegida, en La Mancha se cultivan formidables ejemplares.

Belén que es una romántica ha llevado a su restaurante el recuerdo de su infancia, el aroma del café cuando paseaba por la plaza de Ciudad Real, el aroma del café de Barrenengoa que ahora sirve a todos sus clientes.

Y terminamos el café con una <Culipardas> una creación de ellos que ya tenía el gusto de conocer y que como explica Belén de trata de una magdalena que quiso ser mazapán, la definición lo dice todo, dignas de ser probadas y llevar a casa, que también se puede.

Hacía tiempo que quería regresar a Ciudad Real y comer en Octavio, una recomendación que hago extensiva para los que quieran disfrutar de los aromas y sabores auténticos de esta gran tierra que es Castilla-La Mancha.

Mesón Octavio

Calle Severo Ochoa, 6 13005 Ciudad Real (Ciudad Real)

Telf: 926256050

Email: belen@mesonoctavio.com